El liderazgo es un proceso de influencia entre líder y seguidores que tiene como fin conseguir las metas de un grupo, organización o sociedad.
Cuando termines de leer la última página de esta obra quizás te hagas estas preguntas: "¿a quién no le hubiera gustado estar a las órdenes del Sargento Nevado? ¿Por qué mi jefe no será como este militar? Seguro que así rendiríamos más en el trabajo y estaríamos más contentos." A pesar de que esta obra se enmarca en un contexto muy concreto como es el ejército, creo que el mérito más importante del autor consiste en convencernos de que es posible trasladar a nuestra vida cotidiana las actitudes del Sargento Nevado, ya que cualquiera que pertenezca a un grupo ?y todos los estamos de una manera u otra- puede verse reflejado en las situaciones y pensamientos en los que se encuentra inmerso este militar.
Permitidme que recurra a una comparación para tratar de explicarme mejor; en el ámbito educativo distinguimos entre alumnos superficiales, de logro o profundos; los primeros son aquellos que realizan el mínimo esfuerzo con el único objetivo de conseguir un aprobado; los segundos tratan de alcanzar la máxima calificación y para ello no dudan en realizar todos los esfuerzos que sean necesarios; en el fondo, éstos se centran fundamentalmente, en la tarea; finalmente, los alumnos profundos son aquellos que sin estar pendientes de la calificación que van a obtener, tratan de reflexionar y conocer la verdad sobre un tema; al contrario que los alumnos de logro, valoran por encima de todo las relaciones personales. Pues bien, podríamos incluir al Sargento Nevado entre estos últimos, ya que como dice en más de una ocasión, "más importante es el camino que el lugar al que te lleva"; creo que la principal característica de Nevado es la preocupación y dedicación por las personas, mucho más que por la tarea concreta que se le encomienda como mando militar (enfoque de los estilos de liderazgo), aunque ello no impide que, al igual que los alumnos "profundos", lleve a cabo las tareas encomendadas con brillantez, ya sea en la limpieza de los Carros ?como a él le gusta llamarlos- o en la simulación de una maniobra de combate; de hecho, así se lo reconoce el Capitán en alguna ocasión, cuando le dice: "Me gusta cómo manejas a las tropas. A este método de trabajo se le llama efecto Hawthorne: aumento de la productividad o eficacia por el mero hecho de estar pendiente de los trabajadores". Podríamos decir que lo que realmente le caracteriza, y no sólo a nivel profesional, es la actitud por la que es capaz de decir ante cualquier persona: "¡Me alegro de que existas!". Y esto no sólo frente a aquellos que le piden consejo y le escuchan como el soldado Solera y la soldado Contreras, sino incluso frente a aquellos con los que nunca ha conseguido estar de acuerdo como el Cabo 1º Delegas o el Teniente Serrat.
Sin embargo ¿cómo hubiera reaccionado Nevado si el clima de su tripulación no hubiese sido tan bueno como pretendía el Brigada Moreno, o si se hubiera encontrado en situaciones en las que no estaba definido de antemano lo que había que hacer? (modelo de la contingencia en la efectividad del liderazgo). Quizás en una próxima entrega lo sepamos.
El liderazgo no es sólo poder, en el sentido que defiende el sargento Bueno: "Que la gente haga lo que tenga que hacer o lo que se le ordene, por la razón que sea; si lo hace convencido, mejor que mejor, pero si no, que lo haga por miedo al arresto"; al contrario, el liderazgo va íntimamente unido a la autoridad, es decir, a la capacidad de que los demás hagan las cosas debido a nuestra influencia personal como afirma el Capitán de la compañía: "Lo hago, por que el Sargento Fulanito me ha dicho que lo haga; no porque sea un Sargento y me vaya a arrestar si no lo hago, ni tampoco porque esté de acuerdo con la manera como hay que hacerlo, sino porque el Sargento Fulanito me lo ha dicho, y por él hago lo que sea" (liderazgo transformacional).
Lo más importante para el responsable de la formación de otras personas, ya sea un mando militar, un profesor o un padre de familia, no es tanto lo que se dice, sino el impacto personal que se ejerce sobre los demás, y ello, aún sin llegar a pronunciar ninguna palabra; así le ocurre al sargento Nevado con su Capitán: "Había sido mi primer día a las órdenes directas del Capitán Marcos de Hernández, y aunque no hubiese recibido ni una sola teórica, creí haber aprendido más que en cualquiera de los años de Academia". La autoridad es la capacidad de dar vida, en el sentido de que se les permite crecer y madurar, sin que por ello tengamos que dejar de reprenderlos cuando así se requiera; queda fuera de toda duda la fascinación que experimenta Nevado por su Capitán, debido en gran parte al ajuste entre la conducta de éste y la idea que tiene Nevado sobre lo que ha de ser un buen líder (teorías implícitas de liderazgo); pero a buen seguro, no creo que sean de la misma opinión algunos de los jefes que participaban en las reuniones habituales con Marcos de Hernández en la Sala Táctica.
Uno de los aspectos que el Sargento Nevado se propuso mejorar fue su capacidad de escucha, consciente de que existen una serie de características personales que posibilitan una mejor actuación con las tropas (enfoque del rasgo como teoría del liderazgo); precisamente la investigación sobre inteligencia emocional en ámbitos organizacionales ha puesto de manifiesto que ciertos rasgos de personalidad (como por ejemplo la empatía) contribuyen a la mejora del rendimiento en el trabajo, incluyendo la calidad de las relaciones interpersonales, el trabajo en equipo, la tolerancia al estrés y las cualidades de liderazgo; asimismo estas competencias emocionales se relacionan con criterios como el aumento salarial y el rango en la compañía; teniendo en cuenta que el nivel de estudios alcanzado es uno de los requisitos para lograr el ascenso en el ejército así como una mejora salarial, cabría preguntarse si finalmente, la soldado Contreras -Cargadora de carro de combate- hizo caso a su sargento empleando el tiempo libre de la tarde en terminar los estudios que abandonó cuando se encontraba en el Instituto.
Ojalá muy pronto nos volvamos a encontrar con el sargento Nevado y entonces, quizás nos relate su encuentro con un mando femenino de igual rango o superior, detallándonos si se diferencian en los estilos de liderazgo que adoptan cada uno de ellos (liderazgo y género) o bien, nos explique su interacción con batallones de otras culturas durante su estancia en la misión a la que le destinan por unos meses (liderazgo transcultural) examinando si su estilo de liderazgo es igualmente aplicable en otras naciones y con el mismo éxito que en la base de El Gigante.
Mario Pena Garrido
Profesor de Universidad y
Secretario Adjunto de la Facultad de Educación. UNED